Las Jarchas
En Historia de la literatura española, Deyermond (1987) califica a las Jarchas como uno de los descubrimientos más importantes en los estudios de la literatura española medieval, “Por largo tiempo se creyó que toda la lírica románica se originó a partir de la provenzal, teoría que se vendría abajo ante el descubrimiento por S.M. Stern[1], en 1948, de unos breves poemas escritos fragmentariamente en mozárabe, dialecto arcaico del español utilizado en las zonas de dominio islámico.” Estos poemas fragmentarios (jarchas) eran insertados al final de una Moaxajas(escritas en árabe o hebreo clásico), “especie de composición poética hispano-árabe utilizada asimismo por los poetas hebreos españoles”(28). Las jarchas se consideran como unas de las más tempranas expresiones poéticas en el mundo hispánico. Lo que nos lleva a preguntar: ¿Por qué Deyermond considera a las Jarchas como un descubrimiento importante en la literatura española?
Por mucho tiempo se creyó las primeras manifestaciones poéticas hispánicas habían sido influenciado directamente del Provenzal (una lengua derivada del Latín), sin embargo, por el descubrimiento de Stern, se infiere que en realidad la poesía primitiva española tuvo un origen sincrético. Tres culturas se unieron para formar una jarcha, “tres razas, tres literaturas, tres lenguas colaboran: cristianos, moros y judíos”(Historia y crítica de la literatura española 62). Este producto cultural hibrido demuestra refuta todo intento de definir la literatura hispánica como meramente románica; la cultura ibérica se desarrolló dentro un espacio multicultural y multiétnico[2].
Un estudio literario de las jarchas indica que estos poemas eran de carácter erótico-amoroso, “Pertenecen casi todas las jarchas a u género de poesía de amor femenino: expresan el anhelo de una doncella en la ausencia de su amante”(Deyermond 30).
“Oh tú el más bello de todos los seres!
Mi corazón va en pos tuyo, y no vuelves.
Óyele cuando de ausencia se duele:
Tanto bailé con el ama del cura,
Tanto bailé, que me dio calentura[3] (91).
La primera parte es una Moaxaja, la cual expresa un clamor de la amante por su ausente amado que no ha vuelto y que posee un tono más romántico, en cambio la jarcha expresa un sentimiento ambiguo. La palabra calentura se puede entender como agitación después de una actividad física o una excitación sexual por la particularidad del baile.
Por esta misma cualidad erótica, las jarchas fueron, según Peter Dronke[4], consideradas por la iglesia católica por tener contenido lascivos. De este dato histórico se obtiene una conclusión importante: El erotismo siempre ha existido en las culturas humanas y junto a él, la censura.
Finalmente, el estudio de las jarchas, aparte de desentrañar la historia de la literatura ibérica, también desentraña la historia de la literatura universal, “Los temas que recogen son elementales...se encuentran en las canciones de cualquier época y de cualquier pueblo (Dronke 71). El amor ha sido un tópico universal en la literatura del viejo mundo.
[1] [1] Con respecto a la validez de este descubrimiento Samuel G. Armistead en su ensayo A Brief History of Kharja Studies (University of California, Davis) prefiere hablar de una reinterpretación, “We tend to speak of the “discovery” of the Kharjas. This is a misnomer. Certain Kharjas had, in fact, been known, though their importance went unrecognized for over half a century, when in 1948, Samuel Stern, self-effacingly and without fanfare, interpreted most texts of the Hebrew series in a format that made them readily available to Romanists”(8).
[2] Esto no quiere decir que la convivencia de estas tres culturas fue de forma armoniosa. Por ejemplo A.D. Deyermond, en libro Historia de la literatura español, nos dice que los único que pagaban impuestos eran los judíos y españoles(23). Además señala que los niños mestizos eran generalmente producto de una madre románica y un padre árabe(33). Lo que muestra claramente el balance del poder entre la culturas árabes y románicas.
[4] El articulo de Peter Dronke se encuentra en el compendio de Ensayos de Francisco Rico Historia y Crítica de la Literatura Española. Pagina 68-72.
Gracias por comenzar tu Blog, Dennis. Tengo muchas ganas de seguir tus reflexiones sobre la literatura peninsular. Has integrado muy bien tu lectura de las jarchas con los comentarios de estudiosos (ie. El libro de Deyermond).
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